Offsetting x Insetting: ¿cómo definir una buena estrategia?

El mercado ha observado el creciente comprometimiento de las empresas de los más diversos sectores en la mitigación de sus emisiones de gases de efecto invernadero, como forma de contribuir a limitar el calentamiento global a 1,5°C¹. Además de realizar inventarios de Gases de Efecto Invernadero (GEI) – una importante herramienta que utilizan las organizaciones para cuantificar el impacto de sus operaciones en el cambio climático – las empresas pueden utilizar otros mecanismos para aumentar su potencial de impacto positivo en la naturaleza, ya sea contribuyendo al mantenimiento de proyectos de carbono o vinculando las estrategias de descarbonización a sus operaciones.

La Science Based Targets Initiative (SBTi), lanzada en 2015, fue la primera iniciativa que exigió a las empresas comprometidas con la causa climática reduzcan las emisiones para más allá de las actividades de su responsabilidad, es decir, incluyendo toda su cadena de valor. Como parte de la iniciativa, se creó el Standard corporativo Net Zero fue criado para definir objetivos corporativos para reducir las emisiones de GEI de acuerdo con la ciencia climática.

La creciente adhesión de las empresas al movimiento Net Zero también amplía la procura de soluciones efectivas, con base científica y reconocidas internacionalmente para cumplir con sus ambiciosas estrategias de descarbonización. Entre estas soluciones, se encuentran offsetting e insetting.

Estrategia offsetting

Offsetting es la compensación de las emisiones residuales de una empresa o un producto a través de la compra de créditos de carbono en los mercados regulados y voluntarios, como el Clean Development Mechanism (CDM), Verified Carbon Standard (VCS) y Gold Standard (GS).

De forma general, los créditos de carbono se generan a partir de proyectos desarrollados con base en metodologías preaprobadas. A partir de la definición de esta metodología, se desarrolla un informe de descripción del proyecto, que a su vez es sometido a validación por un tercero.

El proyecto deberá ser aprobado en una serie de criterios del programa al cual será enviado. Uno de estos criterios es que se debe probar la adicionalidad de ese proyecto, es decir, garantizar que el beneficio proporcionado por dicha actividad realmente tiene un diferencial significativo en los aspectos ambientales, económico-financiero y de ejecución, y que no sea una práctica común desarrollada en la región donde se implementará el proyecto.

Después de la validación, el proyecto es monitoreado para probar que las reducciones de emisiones realmente se están llevando a cabo. Cuando hay la comprobación, la fijación de precios utilizada es que una tonelada de gases de efecto invernadero (o toneladas equivalentes de dióxido de carbono) es equivalente a un crédito de carbono.

Posteriormente, cuando una determinada empresa compra este crédito para compensar sus emisiones, lo retira a nombre de la entidad. 

Estrategia insetting

Sin embargo, dado que la offseting solo puede ser utilizado para la compensación de las emisiones residuales (aquellas que no pueden ser evitadas), para lograr sus objetivos Net Zero, las empresas han comenzado a realizar proyectos de gestión de emisiones dentro de su propia cadena de valor (Alcance 3, según GHG Protocol).

Luego viene la práctica que llamamos insetting, en la que se diseñan intervenciones a lo largo de la cadena de valor como una forma de reducir las emisiones de GEI. Comúnmente realizadas a partir de proyectos basados ​​en la naturaleza, estas intervenciones buscan, además de reducir las emisiones y/o capturar GEI, generar impactos positivos para las comunidades, los paisajes y los ecosistemas, como se ilustra en la figura a continuación.

.INTERNATIONAL PLATAFORM FOR INSETTING, 2022.

Dicho mecanismo se puede utilizar junto con el offsetting para facilitar la transición a modelos de negocios menos intensivos en carbono, porque mientras el insetting se enfoca en reducir, evitar y/o capturar las emisiones de Alcance 3, el offsetting se enfoca en compensar las emisiones que no pueden ser evitadas.

Tratándose de un trabajo realizado en conjunto con la cadena de suministro y que no involucra actividades que son de responsabilidad directa de la empresa que está en una estrategia de descarbonización, el insetting presenta algunos desafíos (pero muchas oportunidades) en su implementación. La siguiente figura[1] resume cómo una empresa puede implementar una estrategia de insetting dentro de su cadena de proveedores. La figura presenta 10 lecciones que ayudan a reflexionar y definir tanto un enfoque interno, con la definición de herramientas, indicadores y planes de acción, como un enfoque externo, para que su cadena de valor se comprometa con la causa y que las acciones de reducción de GEI en la atmósfera también tengan otros co-beneficios asociados.

Los dos enfoques son caminos clave para las empresas que están siguiendo la trayectoria de la economía baja en carbono, y deben ser parte de su estrategia del negocio.

Referencias

INTERNATIONAL PLATAFORM FOR INSETTING. A practical guide to insetting: 10 lessons learnt and 5 opportunities to scale from a decade of corporate insetting practice. 2022.

https://www.unep.org/resources/emissions-gap-report-2021

 

 

 

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